Frenar la interna local. Ese fue el motivo central del último plenario del massismo en Tucumán, realizado el último fin de semana un hotel de la capital. Durante ese encuentro, del que participaron una veintena de referentes, también resolvieron adherir a la “marcha del silencio” que se realizará mañana a las 20 para recordar al fiscal Alberto Nisman.
En esa reunión, los dirigentes massistas resolvieron que, desde ahora en adelante, no se involucrarán en internas de otras agrupaciones políticas y, por ahora, frenarán la discusión sobre posibles alianzas electorales con otras fueras. Ocurre que en Tucumán, los referentes peronistas del Frente Renovador (FR) tienen el corazón partido en dos: un grupo apoya al diputado radical José Cano como candidato a gobernador y otro ve con buenos ojos la candidatura del intendente de la capital, Domingo Amaya. No obstante, esta última facción no blanqueó todavía sus aspiraciones de apuntalar la figura del jefe municipal.
En el primer grupo que apoyan a Cano se sitúan el legislador Gerónimo Vargas Aignasse, el concejal Esteban Dumit, el ex senador nacional José Carbonell y el ex vicegobernador de Ramón Ortega, Julio Díaz Lozano. Y en el la otra vereda se ubican los legisladores José Orellana y José Teri, el concejal de Yerba Buena Mauricio Marcoccia y los dirigentes Víctor Arias y “Lito” Mejías. Si bien este sector aún no dijo abiertamente que apoyará la candidatura a gobernador de Amaya, los referentes de este sector mantienen conversaciones permanentes con el amayismo.
La interna estalló la semana pasada cuando Marcoccia dijo que Cano no era un “dirigente serio” porque está -argumentó- con Sergio Massa a nivel nacional y a la vez conversa con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
Al término del encuentro, los referentes limaron asperezas.